10 RAZONES DE INTRUSISMO PROFESIONAL INMOBILIARIO EN BAVARO – PUNTA
CANA
Me
permito redactar en unas líneas mi experiencia vivida como inversor privado en
la República Dominicana, concretamente en Bávaro-Punta Cana.
La primera razón, la cantidad de personas que
ofertan servicios inmobiliarios o de
bienes raíces siendo personas no profesionales del medio y obviamente no
cualificadas para tal fin.
La segunda, que dichas personas no tienen un
domicilio social ni físico, es decir, carecen de oficinas donde desempeñar su
trabajo porque simplemente no son empresas legales.
La tercera, cualquier persona, y reitero cualquiera,
puede venderte o alquilarte lo que sea con total normalidad utilizando engaños
y mentiras.
La cuarta, muchas personas, es decir la mayoría,
ofrecen propiedades sin título lo que repercute en gastos en el futuro a corto,
medio y largo plazo del comprador o cliente.
La quinta, en cuanto al mal estado de conservación
de las propiedades en consecuencia por la falta de interés y no existencia de mantenimiento
preventivo.
La sexta, los problemas generados de aquellas
personas físicas o jurídicas, es decir el común ciudadano de a pie, e incluso
de otros locales comerciales con actividades diferentes a la actividad inmobiliaria o de
bienes raíces que se encargan de administrar condominios y plazas a través de
una administración inadecuada, ineficaz e ineficiente.
La séptima, aquellas agencias inmobiliarias o bienes
raíces, y aquellos vendedores que con mala fe e intención de lucrarse no
legalizan los contratos ante notario ni ante abogados colegiados, y que
presentan credenciales o licencias de agencia inmobiliaria de otros países concretamente
de Estados Unidos ya expiradas y no
válidas aquí en la Republica Dominicana.
La octava, aquellos Abogados que se dedican a
negocios diferentes a su naturaleza jurídica de la abogacía, es decir, a ser puramente
vendedores inmobiliarios sin experiencia ni conocimientos, faltando a los
valores, a la ética y a la profesionalidad de las propias empresas Inmobiliarias
creando una competencia desleal, una ruptura en los precios, y una economía
sumergida de mercado no declarando ni pagando impuestos.
La novena, el sistema de Comisiones, es decir, toda
actividad inmobiliaria entendida de principio a fin, conlleva inseparablemente
las comisiones de diferentes personas incluso sin conocer ni trabajar con el
cliente, desde que aterrizas en el aeropuerto de Punta Cana.
La décima, es la impunidad legislativa y judicial en
el sentido amplio del concepto de intrusismo por daños y perjuicios derivados
de tales mecanismos y modus operandi dentro la práctica libre y no regulada del
sistema inmobiliario de bienes raíces dominicano basado exclusivamente en ganar
e incluso obtener dinero de una manera ilícita y rápida.
Como conclusión, y opinión, aconsejo que:
-Nunca
compren o alquilen una Propiedad de un vendedor que a su vez no represente a
una empresa Inmobiliaria legalizada con su Registro Nacional de Contribuyentes
RNC y con su correspondiente Domicilio Social de oficina.
-Nunca compren una propiedad sin Títulos.
-Nunca te obliguen a trabajar con un determinado
Abogado.
-Nunca compren a un Vendedor que quiera cobrar una
comisión superior en concepto a alquiler de 1mes de comisión por 1 año de
contrato, o ½ mes de comisión por 6 meses de contrato, así como una comisión
superior al 5 % en caso de una operación de venta.
Hoy, estamos obligados a solicitar y exigir una Ley
de Empresas Inmobiliarias inmediata, puesta en práctica que ayude a proteger las
inversiones presentes, y futuras para así evitar está situación de indefensión, engaño, y
deterioro de imagen que está afectando al mercado inmobiliario diariamente, a
los clientes, a los constructores , y por consiguiente que garantice las futuras inversiones del país como base esencial
del desarrollo próspero e innovador de la Rep.Dominicana.
Dr. KOLDOMIRENA U-H©2010
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